La prevención debe realizarse en diferentes entornos:
- Entorno individual: tener un buen concepto de uno mismo, habilidades sociales, valores, asertividad.
- Ambiente social: tener una buena red de amigos, practicar alguna actividad gratificante.
- Ambiente familiar: comunicación familiar positiva, poner límites, relación familiar cercana.
- Ambiente escolar y/o laboral: buen ambiente escolar o laboral, buena comunicación.
CRITERIOS PARA DETECTAR UNA ADICCIÓN
El DSM, que es el manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, incluye en su última revisión la categoría de “Trastornos relacionados con sustancias y adicciones” y dentro de esta categoría el “Trastorno no relacionado con Sustancias”, en el que únicamente aparece el Juego Patológico
El criterio de inclusión de este problema es que las consecuencias relacionadas con el juego patológico presenten características conductuales y alteraciones en los sistemas de recompensa cerebral similares a las de adicción al consumo de sustancias
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Adicción a los videojuegos
Esta primera de las adicciones aún no se considera un diagnóstico oficial, y se ha incluido en la Sección III del DSM-5, en la sección «Condiciones para estudios posteriores en el futuro», con el nombre «Int Trastorno de los juegos de Internet» o «Trastornos de los juegos de Internet».
Según la CIE-11, el trastorno por uso de videojuegos se puede diagnosticar cuando, durante un período de al menos 12 meses, se presenta un comportamiento caracterizado por la pérdida de control sobre el tiempo dedicado a jugar, siendo más prioritario el juego. adquiere sobre otros intereses y actividades y la continuación de este comportamiento a pesar de sus consecuencias negativas.
¿Existe la adicción al sexo?
Una de las cuestiones más controvertidas en relación a las adicciones conductuales es la siguiente: tener sexo muy a menudo o querer practicarlo de forma continuada, ¿es o no es un problema?
Como hemos comentado a lo largo de este artículo, cualquier conducta puede convertirse potencialmente en una adicción, y más aún, el sexo. Esto se debe a que libera altas dosis de dopamina y puede relacionarse con el contacto afectivo y el apego, un refuerzo muy positivo en la mayoría de los seres humanos. Además, la adicción al sexo o hipersexualidad no consiste únicamente en conductas observables, también se reconoce como problema el hecho de tener fantasías constantes, la masturbación compulsiva o el consumo masivo de pornografía.