Qué es una persona tóxica en una relación

Generalmente, se establece una relación tóxica entre dos tipos de personas, una persona manipuladora (pervertido narcisista), y una persona susceptible de culpa, sensible y vulnerable, que sufre de dependencia afectiva y que suele entregarse a los demás.

Tipos y perfiles de personas tóxicas

Victimistas, que culpan a los demás de todo lo que les pasa, contagiando el sentimiento de culpa a través del chantaje emocional.

Quienes critican y descalifican cualquier acción o idea que tenga su víctima, creando un sentimiento de inutilidad y debilitando su autoestima.

¿Por qué la gente se conforma con relaciones tóxicas? Descubre las causas

Puede parecer raro que una persona quiera estar en una relación tóxica, sin embargo, sucede y es muy común.

Esto se debe a una serie de causas que van desde problemas de autoestima, dependencia, trauma, inseguridad, miedo, entre otras.

QUÉ ES UNA RELACIÓN DE PAREJA TÓXICA

Una relación de pareja tóxica es precisamente eso, una relación que te contamina, y te hace cambiar para peor, tu autoestima decae, junto con tu estado de ánimo, te vas alejando de las cosas que te gustan, son frecuentes las peleas con tu pareja que te agotan cada vez más, hasta que te das cuenta que estás atrapado en esa relación.

Los motivos por los que podemos mantener relaciones de pareja tóxicas pueden ser muy diversos. A casi todos nos ha pasado en algún momento por motivos como:

¿Cómo actuar ante ello?

Estar atrapado en una relación tóxica (ya sea romántica o no) puede acarrear graves consecuencias psicológicas: estrés, ansiedad, depresión, falta de autoestima, fobias, problemas somáticos, etc. Alejarse de personas tóxicas es la opción más fácil y efectiva, pero no siempre es posible. ¿Qué podemos hacer entonces? No puedes cambiar el comportamiento del otro, pero puedes cambiar el tuyo o cómo te hace sentir:

  • Analiza, especifica y describe las partes tóxicas de la persona.
  • Contextualiza la situación y piensa que detrás de las conductas tóxicas hay una falta de desarrollo emocional: miedos, frustraciones, carencias, experiencias traumáticas…
  • Pon límites si no puedes reducir el contacto. Siempre puedes denegar el acceso a tu privacidad y decidir hasta qué punto permites que el otro acceda a ti.
  • Relativizar su comportamiento y no seguir su juego.
  • Usa la asertividad, es tu principal arma.
  • Aprende a desconectar cuando empieza a quejarse, encontrar fallos o consumir tu energía.

9 TIPOS DE RELACIONES TÓXICAS:

    1. La relación codependiente: los dos miembros son pasivos, dependen el uno del otro. Las necesidades individuales se pierden, no son satisfechas y necesitan la aprobación del otro para llevar a cabo cualquier acción. Es un tipo de relación que generará malestar e infelicidad por ambas partes a medio y largo plazo.
    2. La relación anclada en el pasado: una relación comienza sin haber superado una relación anterior. Cuando esto sucede, se tiene presente a esa persona recordando experiencias de esa relación para comprender y/o justificar la actual.
    3. La relación de llenado: como la palabra lo indica, la relación cumple con un propósito principal, que es llenar el vacío que siente la persona. Pero, una relación no tiene por qué completar nada más que complementar.

      pareja

    4. La relación en la que la forma de comunicación es pasivo-agresiva: la forma de comunicar no es abierta, clara, se hace a través de indirectas, dando por sentado, etc. Esto conduce a malentendidos y conflictos no resueltos.
    5. La relación basada en ideas irracionales: pensamientos irreales y distorsionados sobre el amor y lo que es una relación, sea la que sea.
    6. La relación donde la mentira es habitual: una relación debe basarse en la confianza. Omitir, ocultar, solo crea barreras, dudas y conflictos.
    7. La relación basada en el miedo: cuando hay maltrato, ya sea físico y/o psicológico, el miedo invade a la persona que lo sufre, anulando cualquier posibilidad de escape o búsqueda de soluciones. Este tipo de relaciones son las más tóxicas y peligrosas.
    8. La relación idealizada: cuando las cosas no se discuten y las cosas se aclaran, podemos generar expectativas que no se ajustan a la realidad y esto puede llevarnos a esperar del otro cosas que no son realistas.
    9. La relación en la que los roles ya están preestablecidos: uno dirige, controla, decide y el otro se acomoda y se comporta sumiso.
  1. La relación de codependencia: los dos miembros son pasivos, dependen el uno del otro. Las necesidades individuales se pierden, no son satisfechas y necesitan la aprobación del otro para llevar a cabo cualquier acción. Es un tipo de relación que generará malestar e infelicidad por ambas partes a medio y largo plazo.
  2. La relación anclada en el pasado: una relación comienza sin haber superado una relación anterior. Cuando esto sucede, se tiene presente a esa persona recordando experiencias de esa relación para comprender y/o justificar la actual.
  3. La relación de llenado: como la palabra lo indica, la relación cumple con un propósito principal, que es llenar el vacío que siente la persona. Pero, una relación no tiene por qué completar nada más que complementar.

    pareja

  4. La relación en la que la forma de comunicación es pasivo-agresiva: la forma de comunicar no es abierta, clara, se hace a través de indirectas, dando por sentado, etc. Esto conduce a malentendidos y conflictos no resueltos.
  5. La relación basada en ideas irracionales: pensamientos irreales y distorsionados sobre el amor y lo que es una relación, sea la que sea.
  6. La relación donde la mentira es habitual: una relación debe basarse en la confianza. Omitir, ocultar, solo crea barreras, dudas y conflictos.
  7. La relación basada en el miedo: cuando hay maltrato, ya sea físico y/o psicológico, el miedo invade a la persona que lo sufre, anulando cualquier posibilidad de escape o búsqueda de soluciones. Este tipo de relaciones son las más tóxicas y peligrosas.
  8. La relación idealizada: cuando las cosas no se discuten y las cosas se aclaran, podemos generar expectativas que no se ajustan a la realidad y esto puede llevarnos a esperar del otro cosas que no son realistas.
  9. La relación en la que los roles ya están preestablecidos: uno dirige, controla, decide y el otro se acomoda y se comporta sumiso.
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